Partiendo del concepto tan
ampliamente aceptado en la actualidad, por el cual los seres humanos somos definidos como seres eminentemente sociales, podemos afirmar que el hombre en su estrecha relación con sus semejantes logra
identificarse y crear una narrativa sobre sí mismo, esta narrativa
creada por él sobre sí mismo se denomina identidad y a raíz de ella surgen
otros conceptos como los de autoestima la cual puede ser entendida, en su forma
más básica, como el amor que uno se tiene así mismo, una suerte de ego
controlado que nos hace sentir valiosos independientemente de los factores
externos.
El amor que uno posee debe estar
desligado de la materialidad, es decir de las cosas materiales que se poseen,
al referir material se entiende como algo palpable a la vista o a los sentidos.
Nada más falso, pues nosotros somos valiosos solo por el hecho de ser seres
humanos, cosa que muchos han olvidado pues se han sumergido en la búsqueda de aceptación de grupo mediante la posesión de
objetos materiales, así podemos ver claramente
cómo muchos de nosotros alguna vez, incluso de forma casi imperceptible para nuestro consiente, hemos querido llamar la atención, comprarse nuevas zapatillas o adquirir un nuevo reloj y levantar la mano muy a menudo para que
todos lo vean, revela que muchos de nosotros en algún momento hemos buscado la
aceptación de los demás mediante estos objetos, mediante esto estamos enviando
a nuestro cerebro un mensaje muy claro, “Yo, por sí solo, en mi naturalidad, no
soy valido o simplemente no valgo”, así que en casos extremos podríamos citar algunos ejemplos,como aquella muchacha que no soporta su
naturalidad y tiene en el baño toda clase se cosméticos para evitar cualquier
hedor de su cuerpo por más mínimo que sea, esto llevado a una actitud
compulsiva, revela que queremos despojarnos de nuestra naturalidad como seres
humanos y tratar de ocultarlo plásticamente, y el mismo mensaje se repite, “Yo
por si solo no valgo, necesito de mis cosméticos para ser aceptado, para ser
válido” es decir que nuevamente un objeto material, los cosméticos, te hacen
mejor o peor persona.
Muchos de nosotros en nuestra
labor como docentes vemos como los jóvenes se dejan influenciar por sus mismos
compañeros o por otros factores externos como la televisión que obligan a comprar tal o cual ropa, tal o cual marca
solo para, según estos medios, ser aceptado en el entorno social enfermo que nos
rodea; con esta actitud seguimos enviando el mensaje a nuestro subconsciente de
que somos valiosos en cuento lo que tenemos y no en cuanto somos.
Si seguimos esta línea, podemos
llegar a otro punto, la aceptación de
los demás, este punto es poco controversial pero debe entenderse claramente le
contexto en que se evoca, La famosa frase “que sería de mi sin ti” o “no fui yo
si no fue Juan el que debe llevarse todo el crédito; aun cuando puede
confundirse con la modestia, en un determinado contexto es un indicio de que la
persona posee baja autoestima, puesto que nosotros somos valiosos
independientemente de los demás, al momento de poner nuestra valía por el hecho
de que el otro existe refleja que no estamos reconciliados con nosotros y que
deberíamos trabajar un poco para poder elevar
nuestra autoestima. Tu eres valioso independientemente del otro.
Los novios son un claro ejemplo
de ello, los enamorados supeditan su existencia al hecho de que la otra persona
existe, esto es, que ella o él existen y viven solo por la otra persona, y
terminan siempre con frases como, “nunca de dejaré de amar “frase que se
acabará cuando el joven se enamores de otra o ella ya no vea a su príncipe azul
en eso que tiene al lado, lo cierto es que esta dependencia nos indica que hay
muchas personas que para considerarse valiosas necesitan de otro ser humano y
que este le reconozca como tal, cuando no es así puede llegar a desencadenarse
hechos tan horribles como el suicidio, todo por producto de una baja autoestima
que es derivada de una dependencia de alguien.
Es común encontrarse con ciertas
circunstancias que son indicadoras que debemos trabajar en elevar nuestra
autoestima, yo lo he visto en el salón de clases y sé que muchos también en algún
momento de su vida lo ha experimentado; el hecho empieza en un Salón de clases
en medio del cambio de hora de los profes, es allí cuando se arma un alboroto
hasta que el otro profesor entre, yo al retirarme pude ver esta escena, eran un
par de jóvenes que estaban gastando una broma a otro, consistía en llamar sonso
al otro a sus espaldas para tentar que este responda, si responde quiere decir
que este de alguna manera se considera así y este para empieza a reír, seguro
que me han entendido por que es común y es más, muchos de nosotros lo habremos
hecho; vámonos al hecho de voltear cuando alguien te llame por un despectivo,
esto refleja de que el otro, al voltear, se considera de esa forma o cosa
contraria cuando alguien nos elogia no le creemos y pensamos casi de inmediato
que favor nos pedirá , pues no estamos aún convencidos de que somos valiosos
Decir que somos valiosos muy a
menudo, es decir, que las actitudes jactanciosas y arrogantes de algunos
revelan que también poseen baja autoestima, buscan llamar la atención y llegar
al punto de exigirles amor a los demás.
Para finalizar hay que tener
presente que nuestra felicidad depende mucho de nosotros mismos de cómo nos
vemos nosotros, esto independientemente de los demás tanto personas como bienes
materiales. Somos valiosos simplemente por ser seres humanos libres e hijos de
Dios. Tú haz lo que tienes que hacer en la vida, puesto que la felicidad
siempre estará detrás de ti.